El vestuario es muy importante a la hora de causar una buena impresión

El vestuario en un hombre es un elemento muy importante a la hora de causar una buena impresión. Y hay que tener presente que lo primero en lo que se fijan los demás, es en nuestra apariencia externa. Aunque los importantes valores de una persona no sean su vestuario, hay que causar siempre una buena impresión.

Saber estar no consiste solamente en ser educado, sino en un conjunto de factores entre los que ocupa un lugar muy importante nuestro vestuario. Te presentamos diez reglas a las que todo hombre debe prestar atención antes de salir de casa.

1. Presta especial atención a los zapatos. Sin ninguna duda, los zapatos son la parte más importante de la indumentaria de un hombre. Aunque contrariamente sea la prenda a la que menos atención se presta, son la pieza clave de tu estilo. Ten en cuenta que hasta el más prestigioso de los trajes puede verse malogrado si lo combinamos con unos zapatos de mediocre calidad.

Si no quieres fallar elige siempre unos zapatos negros y preferentemente de cordones para combinar con tu traje. Tampoco es de buen gusto combinar tu traje con unos castellanos.

2. Elije los calcetines según el color del pantalón, como es difícil encontrarlos exactamente de la misma tonalidad, escoge siempre los calcetines ligeramente más oscuros que tu pantalón. Nunca elijas el color de los calcetines según el color de tus zapatos, demuestra mal gusto. Y por supuesto deja los de color blanco únicamente para hacer deporte.

3. Rehúye del cinturón; este divide el cuerpo en dos mitades y tal efecto óptico acorta la figura y resta fluidez al conjunto del hombre. Al contrario los tirantes son más elegantes, mantienen los pantalones siempre en su sitio y aportan distinción y un toque sofisticado que difícilmente conseguiremos con ningún cinturón. Pese a ello, si decides usar cinturón evita los colores claros, ten en cuenta que cuanto mayor sea el contraste de color entre el cinturón y el pantalón, peor se ve el resultado. Por otro lado, referente a la hebilla deberá ser lo más pequeña posible.

4. La marca no importa; lo que importa es la talla correcta. No importan la marca ni el precio que pagues por cualquier prenda de tu vestimenta, si no llevas la talla correcta tu imagen disminuirá de inmediato. Muchos hombres creen que por llevar un traje de una marca de prestigio automáticamente te ara lucir más elegante, craso error, ninguna marca te hará ser más elegante, tú eres quien debe hacer lucir a la prenda.

5. Combinar los colores de forma acertada es una de las partes más importantes a la hora de crear un atuendo inolvidable, y es que saber combinarlos es un arte. No todos los colores favorecen a todo el mundo por igual, ni tampoco todos los colores combinan bien entre sí.

El color de nuestra piel como el de nuestro pelo influye bastante a la hora de escoger un color u otro de una prenda. Por ejemplo a un hombre de pelo rubio le suele favorecer una corbata de color cercano al amarillo o al beige, por el contrario a un hombre de pelo moreno le favorece más una corbata de colores oscuros, como el azul marino o el marrón.

Con respecto al color de la piel, intenta siempre crear el mayor contraste posible entre el color de tu piel y el color de la prenda. A los hombres de piel clara les favorecen los colores oscuros; el negro, el azul marino, el gris marengo… a las pieles oscuras les favorecen los colores más claros. El blanco destacara más su color de piel, y ese contraste les favorecerá.

Los hombres de piel clara y pelo oscuro, deberán transmitir el mismo contraste en sus prendas, es decir, una camisa de un color claro o blanca con una corbata de un color oscuro es siempre una combinación acertada para ellos.

6. Presta especial atención a la hora de combinar diferentes diseños. Las prendas estampadas o con diferentes diseños (cuadros, rayas, círculos, etc.) son sin duda las más difíciles de combinar, por ello su correcta combinación no solo transmite elegancia sino también estilo.

Los estampados suelen combinar mal entre ellos. La mejor opción para combinar una prenda estampada es una prenda lisa, que tenga alguno de los colores que componen el estampado.

Si hablamos de prendas con rayas, no suelen combinar bien con cuadros. Las rayas y los cuadros, combinan mejor por separado. Al igual que en el caso de los estampados, combinan mejor con prendas lisas, o con pequeños estampados.

Si decidimos, combinar prendas con rayas, es aconsejable que sean distintas en tamaño y en distinta disposición, para romper la uniformidad de las rayas en el mismo sentido y del mismo tamaño. Si quieres combinar su traje de raya diplomática con una camisa de rayas, las rayas de la camisa deberan ser distintas tanto en tamaño como en separación entre ellas con respecto a las rayas del traje diplomático. Las de la corbata pueden cambiar de orientación para dar un mayor contraste.

Debemos recordar que no es muy elegante combinar más de tres colores a la vez en su vestuario.

Si bien tener estilo no está al alcance de todos, la elegancia siguiendo unas mínimas normas no es difícil de conseguir.

7. Apuesta siempre por la “elegancia clásica”, ya que es como el arte, nunca pasa de moda. Las modas van y vienen pero la elegancia clásica siempre se conserva.

Observa los trajes y la vestimenta de Gary Grant, quién representa la coronación de la elegancia clásica masculina. Hoy, veintinueve años después de su desaparición su nombre sigue representando a una de las personas más elegantes de todos los tiempos y que marco un estilo que todavía hoy es imitado no solo por actores como George Clooney, sino también por aquellos hombres que buscan distanciarse de las modas pasajeras.

8. Los complementos adecuados marcan la diferencia fundamental en tu estilo. Que los detalles sean los adecuados, ayudan a potenciar la elegancia. Estos dan un toque personal a la hora de combinarlos con las prendas de vestir que marcan la diferencia, ya que los complementos son en lo que la gente más se fija para reconocer el buen gusto.

Unos gemelos frente a un puño sencillo, un fino y elegante reloj, una corbata bien combinada, un pañuelo de bolsillo frente a un bolsillo desprovisto de él, etc., son siempre complementos que hablan no solo de la elegancia de su propietario sino también de su gusto por lo refinado y su interés por transmitir una imagen cuidada.

9. La elegancia es sinónimo de sencillez y discreción. La elegancia radica en la sencillez, por lo que la discreción es un aspecto a tener en cuenta a la hora de ser un hombre elegante. Por ello, procura evitar todo tipo de actitudes ordinarias y vulgares. Al contrario de lo que muchas personas creen, la elegancia no es sinónimo de lujo y ostentación sino más bien todo lo contrario.

Evita llamar la atención por vestir prendas llamativas en color o diseño, un simple y discreto traje de color oscuro, con una camisa blanca lisa y una corbata oscura es mucho más elegante que un conjunto muy recargado.

No olvides que en cuestión de elegancia menos es más. Recuerda que el protagonista debes ser tú y no la ropa que vistas.

10. Por último, pero no menos importante; cuida el resultado final. Un nudo de la corbata mal hecho, un pantalón arrugado o con muestras de un excesivo uso, unos zapatos sin lustrar son solo algunos casos de dejadez con los que con total seguridad arruinaras todo tu conjunto. Presta una especial atención a todos estos pequeños pero muy importantes detalles. Recuerda que ser elegantes incluye cuidar los gestos corporales de tal forma que transmitan armonía, gracia y educación.

Cualquiera de nosotros podríamos añadir a estas 10 normas otras muchas más. Pero solo poniendo en práctica estas sencillas indicaciones estaremos preparados para vestir de forma elegante.

Si bien tener estilo no está al alcance de todos, la elegancia siguiendo unas mínimas normas no es difícil de conseguir.

El Estilista

 

El vestuario es muy importante a la hora de causar una buena impresión

El vestuario en un hombre es un elemento muy importante a la hora de causar una buena impresión. Y hay que tener presente que lo primero en lo que se fijan los demás, es en nuestra apariencia externa. Aunque los importantes valores de una persona no sean su vestuario, hay que causar siempre una buena impresión.

Saber estar no consiste solamente en ser educado, sino en un conjunto de factores entre los que ocupa un lugar muy importante nuestro vestuario. Te presentamos diez reglas a las que todo hombre debe prestar atención antes de salir de casa.

1. Presta especial atención a los zapatos. Sin ninguna duda, los zapatos son la parte más importante de la indumentaria de un hombre. Aunque contrariamente sea la prenda a la que menos atención se presta, son la pieza clave de tu estilo. Ten en cuenta que hasta el más prestigioso de los trajes puede verse malogrado si lo combinamos con unos zapatos de mediocre calidad.

Si no quieres fallar elige siempre unos zapatos negros y preferentemente de cordones para combinar con tu traje. Tampoco es de buen gusto combinar tu traje con unos castellanos.

2. Elije los calcetines según el color del pantalón, como es difícil encontrarlos exactamente de la misma tonalidad, escoge siempre los calcetines ligeramente más oscuros que tu pantalón. Nunca elijas el color de los calcetines según el color de tus zapatos, demuestra mal gusto. Y por supuesto deja los de color blanco únicamente para hacer deporte.

3. Rehúye del cinturón; este divide el cuerpo en dos mitades y tal efecto óptico acorta la figura y resta fluidez al conjunto del hombre. Al contrario los tirantes son más elegantes, mantienen los pantalones siempre en su sitio y aportan distinción y un toque sofisticado que difícilmente conseguiremos con ningún cinturón. Pese a ello, si decides usar cinturón evita los colores claros, ten en cuenta que cuanto mayor sea el contraste de color entre el cinturón y el pantalón, peor se ve el resultado. Por otro lado, referente a la hebilla deberá ser lo más pequeña posible.

4. La marca no importa; lo que importa es la talla correcta. No importan la marca ni el precio que pagues por cualquier prenda de tu vestimenta, si no llevas la talla correcta tu imagen disminuirá de inmediato. Muchos hombres creen que por llevar un traje de una marca de prestigio automáticamente te ara lucir más elegante, craso error, ninguna marca te hará ser más elegante, tú eres quien debe hacer lucir a la prenda.

5. Combinar los colores de forma acertada es una de las partes más importantes a la hora de crear un atuendo inolvidable, y es que saber combinarlos es un arte. No todos los colores favorecen a todo el mundo por igual, ni tampoco todos los colores combinan bien entre sí.

El color de nuestra piel como el de nuestro pelo influye bastante a la hora de escoger un color u otro de una prenda. Por ejemplo a un hombre de pelo rubio le suele favorecer una corbata de color cercano al amarillo o al beige, por el contrario a un hombre de pelo moreno le favorece más una corbata de colores oscuros, como el azul marino o el marrón.

Con respecto al color de la piel, intenta siempre crear el mayor contraste posible entre el color de tu piel y el color de la prenda. A los hombres de piel clara les favorecen los colores oscuros; el negro, el azul marino, el gris marengo… a las pieles oscuras les favorecen los colores más claros. El blanco destacara más su color de piel, y ese contraste les favorecerá.

Los hombres de piel clara y pelo oscuro, deberán transmitir el mismo contraste en sus prendas, es decir, una camisa de un color claro o blanca con una corbata de un color oscuro es siempre una combinación acertada para ellos.

6. Presta especial atención a la hora de combinar diferentes diseños. Las prendas estampadas o con diferentes diseños (cuadros, rayas, círculos, etc.) son sin duda las más difíciles de combinar, por ello su correcta combinación no solo transmite elegancia sino también estilo.

Los estampados suelen combinar mal entre ellos. La mejor opción para combinar una prenda estampada es una prenda lisa, que tenga alguno de los colores que componen el estampado.

Si hablamos de prendas con rayas, no suelen combinar bien con cuadros. Las rayas y los cuadros, combinan mejor por separado. Al igual que en el caso de los estampados, combinan mejor con prendas lisas, o con pequeños estampados.

Si decidimos, combinar prendas con rayas, es aconsejable que sean distintas en tamaño y en distinta disposición, para romper la uniformidad de las rayas en el mismo sentido y del mismo tamaño. Si quieres combinar su traje de raya diplomática con una camisa de rayas, las rayas de la camisa deberan ser distintas tanto en tamaño como en separación entre ellas con respecto a las rayas del traje diplomático. Las de la corbata pueden cambiar de orientación para dar un mayor contraste.

Debemos recordar que no es muy elegante combinar más de tres colores a la vez en su vestuario.

Si bien tener estilo no está al alcance de todos, la elegancia siguiendo unas mínimas normas no es difícil de conseguir.

7. Apuesta siempre por la “elegancia clásica”, ya que es como el arte, nunca pasa de moda. Las modas van y vienen pero la elegancia clásica siempre se conserva.

Observa los trajes y la vestimenta de Gary Grant, quién representa la coronación de la elegancia clásica masculina. Hoy, veintinueve años después de su desaparición su nombre sigue representando a una de las personas más elegantes de todos los tiempos y que marco un estilo que todavía hoy es imitado no solo por actores como George Clooney, sino también por aquellos hombres que buscan distanciarse de las modas pasajeras.

8. Los complementos adecuados marcan la diferencia fundamental en tu estilo. Que los detalles sean los adecuados, ayudan a potenciar la elegancia. Estos dan un toque personal a la hora de combinarlos con las prendas de vestir que marcan la diferencia, ya que los complementos son en lo que la gente más se fija para reconocer el buen gusto.

Unos gemelos frente a un puño sencillo, un fino y elegante reloj, una corbata bien combinada, un pañuelo de bolsillo frente a un bolsillo desprovisto de él, etc., son siempre complementos que hablan no solo de la elegancia de su propietario sino también de su gusto por lo refinado y su interés por transmitir una imagen cuidada.

9. La elegancia es sinónimo de sencillez y discreción. La elegancia radica en la sencillez, por lo que la discreción es un aspecto a tener en cuenta a la hora de ser un hombre elegante. Por ello, procura evitar todo tipo de actitudes ordinarias y vulgares. Al contrario de lo que muchas personas creen, la elegancia no es sinónimo de lujo y ostentación sino más bien todo lo contrario.

Evita llamar la atención por vestir prendas llamativas en color o diseño, un simple y discreto traje de color oscuro, con una camisa blanca lisa y una corbata oscura es mucho más elegante que un conjunto muy recargado.

No olvides que en cuestión de elegancia menos es más. Recuerda que el protagonista debes ser tú y no la ropa que vistas.

10. Por último, pero no menos importante; cuida el resultado final. Un nudo de la corbata mal hecho, un pantalón arrugado o con muestras de un excesivo uso, unos zapatos sin lustrar son solo algunos casos de dejadez con los que con total seguridad arruinaras todo tu conjunto. Presta una especial atención a todos estos pequeños pero muy importantes detalles. Recuerda que ser elegantes incluye cuidar los gestos corporales de tal forma que transmitan armonía, gracia y educación.

Cualquiera de nosotros podríamos añadir a estas 10 normas otras muchas más. Pero solo poniendo en práctica estas sencillas indicaciones estaremos preparados para vestir de forma elegante.

Si bien tener estilo no está al alcance de todos, la elegancia siguiendo unas mínimas normas no es difícil de conseguir.

El Estilista